Más de 5 años dedicados al cuidado y bienestar de animales, con experiencia propia y profesional. He convivido y trabajado con mi compañero Horus, un perro reactivo, desarrollando técnicas amorosas y pacientes para ayudarlo a gestionar su comportamiento y brindarle seguridad. A través de terapias energéticas y terapia floral, he apoyado su bienestar emocional, logrando avances significativos en su tranquilidad y confianza. Con decir que ya no es reactivo, a base de paciencia, confianza y fortalecer cada día el vínculo. Esta experiencia me ha permitido comprender profundamente las necesidades emocionales de los animales y cómo acompañarlos desde el respeto y el amor, fortaleciendo el vínculo y promoviendo su equilibrio integral.